MACHINE NAME = WEB 1

La transición energética exige reformas más rápidas de los tratados de inversión

30 agosto 2023

La UNCTAD lanza una caja de herramientas para hacer que los acuerdos internacionales de inversión apoyen mejor el paso a fuentes de energía renovables.

Coal power plant and wind turbines in Eemshaven port in the Netherlands
Default image copyright and description

© Shutterstock/Sander van der Werf | Turbinas eólicas y una central eléctrica de carbón en el puerto de Eemshaven (Países Bajos).

Cada año, las sofocantes olas de calor resaltan la urgencia de acelerar la transición energética, la cual requiere una reforma más rápida de los acuerdos internacionales de inversión (AII) para que apoyen el abandono de los combustibles fósiles.

Alcanzar las cero emisiones netas para el 2050 requiere que las inversiones mundiales anuales en energías limpias se tripliquen de aquí a 2030 para alcanzar los 4 billones de dólares.

Pero muchos tratados de inversión, especialmente los más antiguos, pueden obstaculizar la transición. A medida que los países intentan cortar sus lazos con los combustibles fósiles, las empresas petroleras y de gas pueden utilizar estos tratados para impugnar los cambios políticos.  Una demanda contra los Países Bajos por la eliminación progresiva del carbón sirve como ejemplo.

"Los gobiernos y la comunidad internacional de inversores deben intensificar sus esfuerzos para reformar los tratados de inversión en apoyo de la transición energética y para minimizar los riesgos de costosos litigios", afirma Hamed El-Kady, quien dirige la sección de acuerdos internacionales de inversión de la UNCTAD.

La UNCTAD ha desarrollado una caja de herramientas para ayudar a los países a transformar los AII para respaldar mejor la transición energética.

Los antiguos acuerdos dificultan la regulación

La mayoría de los AII pertenecen al "antiguo régimen", ya que más del 89% de los 2.584 tratados en vigor se firmaron antes de 2012.

Según un nuevo informe de la UNCTAD, estos AII de generaciones anteriores están detrás de casi todos los casos de resolución de disputas inversores y Estados (ISDS por sus siglas in inglés) conocidos públicamente.

Los inversores tanto en combustibles fósiles como en energías renovables recurren a menudo al arbitraje de inversiones, y juntos representan alrededor de una cuarta parte de los casos de ISDS.

El mecanismo ISDS fue diseñado para proteger a los inversores extranjeros de acciones gubernamentales "excesivas". Pero también está limitando la capacidad de los países para regular, incluso cuando buscan objetivos legítimos de política pública, como Promover la energía renovable.

Casos de combustibles fósiles y energías renovables

Los inversores en combustibles fósiles han iniciado más del 15% de todos los casos conocidos de ISDS basados en tratados.

Un ejemplo reciente de alto perfil es el caso RWE v. Países Bajos. La empresa energética alemana RWE, propietaria de centrales eléctricas de carbón en los Países Bajos, ha presentado demandas contra el Gobierno tras su decisión de prohibir la combustión de carbón para la producción de electricidad de aquí al año 2030, en línea con los compromisos del país en virtud del Acuerdo de París.

Las energías renovables también están en el punto de mira de la justicia. Al menos el 8% de los casos están relacionados con recortes en los incentivos para energías limpias. A menudo se trata de tarifas de alimentación, un mecanismo político utilizado para hacer que los precios de la energía renovable sean más competitivos, como los utilizados para impulsar las inversiones en energía solar. Uno de estos casos es Infracapital v. España.

Si bien los casos citados fueron presentados contra países desarrollados, los mismos riesgos existen para las naciones en desarrollo.

Alrededor del 85% de los AII en vigor implican al menos a un país en desarrollo y crean obligaciones vinculantes para sus gobiernos que pueden hacerse valer a través del ISDS.

Una nueva caja de herramientas

La nueva caja de herramientas de la UNCTAD se centra en cuatro áreas de acción.

  • Promoción y facilitación de la inversión en energía sostenible: Las nuevas disposiciones de los AII que buscan activamente este tipo de inversiones no tienen por qué estar sujetas al arbitraje entre inversores y Estados. Los países podrían comprometerse a adoptar medidas como la eliminación de obstáculos para las tecnologías y servicios en el sector de las energías renovables y ofrecer condiciones preferenciales para este tipo de inversiones.
     
  • Transferencia y difusión de tecnología: Los Estados pueden cooperar en la transferencia de tecnologías sostenibles incluyendo explícitamente disposiciones de este tipo en los AII. En cuanto a la protección de los derechos de propiedad intelectual, las partes de los tratados deben garantizar que las flexibilidades disponibles en virtud del Acuerdo sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio (ADPIC) de la Organización Mundial del Comercio puedan utilizarse en el marco de los AII y en los casos de ISDS.
     
  • El derecho a regular la acción climática y la transición energética: Los países pueden perfeccionar las normas de protección de las inversiones para ofrecer flexibilidad reguladora y excepciones para los problemas climáticos y energéticos.
     
  • Responsabilidad social corporativa (RSC): Los AII pueden incluir directrices vinculantes de RSC y ayudar a fomentar su cumplimiento, en particular exigiendo a los inversores energéticos que adopten prácticas de inversión sostenibles.

"Para utilizar eficazmente la nueva caja de herramientas, los países pueden modificar o renegociar los tratados actuales", afirmó El-Kady.

Los países también pueden rescindir un AII sin sustituirlo, y es posible hacerlo de forma unilateral. La caja de herramientas señala que los países pueden optar por la opción de la rescisión junto con los intentos de negociar un nuevo acuerdo.

Foro Mundial de Inversiones

La caja de herramientas estará entre las prioridades de la agenda del Foro Mundial de Inversiones de la UNCTAD, que se celebrará del 16 al 20 de octubre en Abu Dhabi. En el foro, también se discutirán otras soluciones concretas para reformar el régimen de AII, con el objetivo de aumentar la inversión en energía sostenible y hacer frente a la crisis climática mundial.

Los resultados del foro alimentarán las negociaciones de la cumbre anual sobre el clima (COP28), cuyo inicio está previsto para finales de noviembre en Dubái.