Un informe señala que las inversiones en américa del sur se disparan mientras que los flujos hacia américa central y el caribe disminuyen
Según el Informe sobre las inversiones en el mundo 20131 de la UNCTAD, la disminución del 17% de la inversión extranjera directa (IED) en América Central y el Caribe en 2012 ocultó un aumento del 12% en América del Sur ese año.
Esa resultados dispar resultó en una disminución del 2% en toda la región de América Latina y el Caribe.
El Informe, subtitulado "Las cadenas de valor mundiales, la inversión y el comercio para el desarrollo", se ha publicado hoy.
En él se señala que en 2012 la IED en la región alcanzó un total de 244.000 millones de dólares. Los flujos hacia América Central y el Caribe se cifraron en 99.000 millones de dólares y la IED en los países de América del Sur llegó a 144.000 millones.
Según el Informe, los factores que hacen que América del Sur siga siendo un destino atractivo para la IED son su riqueza en petróleo, gas y minerales, y una clase media en rápida expansión que atrae inversión en busca de mercados.
La IED aumentó en América del Sur pese a su desaceleración en el principal receptor de la subregión, Brasil (-2%, hasta 65.000 millones de dólares), después de dos años de alto crecimiento. En 2012 el crecimiento de la IED fue impulsado por países como Chile (+32%, hasta 30.000 millones de dólares), Colombia (+18%, hasta 16.000 millones de dólares), la Argentina (+27%, hasta 13.000 millones de dólares) y el Perú (+49%, hasta 12.000 millones de dólares), que fueron, por este orden, los principales países receptores de América del Sur detrás del Brasil.
En América Central y el Caribe, sin incluir los centros financieros transnacionales, se registró una disminución del 20% de la IED hasta 25.000 millones de dólares debido a un descenso del 41% de la inversión en México hasta 12.700 millones de dólares, se señala en el Informe. La IED en los centros financieros transnacionales de la región disminuyó un 16% hasta situarse en 74.000 millones de dólares. Sin embargo, el volumen total sigue superando el nivel alcanzado antes de la crisis financiera mundial.
Según el Informe, las ventas de fusiones y adquisiciones transfronterizas en 2012 aumentaron un 5% hasta 21.000 millones de dólares, registrando un cambio importante en el origen de los compradores. Ese año las empresas transnacionales (ETN) basadas en países en desarrollo siguieron aumentando sus adquisiciones, que crecieron un 26%. Las Adquisiciones involucraron principalmente fuentes intrarregionales (empresas con sede en países como Chile, la Argentina, Colombia y el Brasil), mientras que las ETN de los países desarrollados vendieron más activos de los que adquirieron. En particular, las empresas europeas agobiadas por la deuda vendieron activos para obtener liquidez, como en el caso del Banco Santander (España), que vendió un 95% de su participación en su sucursal colombiana a CorpBandca (Chile) por alrededor de 1.200 millones de dólares para poder centrarse en sus actividades y negocios centrales.
En el Informe se indica que en 2012 las salidas de IED de América Latina disminuyeron un 2%, hasta 103.000 millones, registrando un crecimiento desigual según el país. Sin embargo, estos datos no reflejan el dinamismo de la actividad de las ETN de América Latina en el exterior, demostrado por el aumento del 74% de sus adquisiciones transfronterizas en 2012, hasta 33.000 millones de dólares. El incremento de las adquisiciones de las ETN de América Latina en el exterior es una tendencia que comenzó en 2006, alcanzó su punto álgido en 2007 y se vio interrumpida por la crisis financiera mundial, antes de reanudarse en 2010. Entre 2010 y 2012 las empresas de América Latina gastaron una cifra neta de 66.000 millones de dólares en adquirir empresas en el extranjero. El optimismo frente a la situación interna, la abundancia de liquidez en los balances y la saturación de los mercados internos han alentado a estas ETN a buscar nuevas oportunidades en el extranjero, se indica en el Informe. En la actualidad, la mayoría de estas adquisiciones tienen lugar en América Latina y los países desarrollados, más o menos en la misma medida.
En el Informe se señala que la IED en América del Sur sigue estando centrada en las industrias extractivas, en las que las empresas extranjeras ocupan una posición dominante, excepto en el Brasil. La IED en este sector es cada vez más importante en algunos países. Por ejemplo, en Colombia, mientras que la participación de la industria extractiva en el valor acumulado de IED fue del 26% en 2002, esa industria atrajo un 53% de los flujos totales de IED entre 2003 y 2012. En Chile, la participación de la industria extractiva en el volumen acumulado de IED aumentó del 27% al 39% entre 2006 y 2011, mientras que en el Perú aumentó del 14% en 2001 al 27% en 2011. Únicamente la Argentina registró una disminución de la participación de la industria extractiva en el volumen acumulado total de IED durante la segunda mitad del decenio de 2000, de un 40% en 2005 a un 31% en 2011. El aumento de la participación de la industria extractiva en la IED en determinados países de América del Sur concuerda con la importancia cada vez mayor de dicha industria en las exportaciones y el valor añadido.
En 2012 se adoptaron nuevas medidas de política en el Brasil en el contexto de su nueva política industrial, tecnológica y de comercio exterior puesta en marcha en 2011. Esta política prevé una combinación de incentivos fiscales, créditos a tipos preferenciales del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) del Brasil y desgravaciones fiscales. En particular, se aprobó un nuevo régimen para la industria del automóvil (Inovar-Auto) a fin de fomentar la inversión en la eficiencia de los vehículos, la producción nacional, la investigación y el desarrollo, y la tecnología automotriz. En parte gracias a ello, la IED en la industria del automóvil (montaje y repuestos) se disparó de un promedio anual de 116 millones de dólares entre 2007 y 2010 a un promedio de 1.600 millones de dólares en 2011 y 2012.
Del mismo modo, según el Informe, la deslocalización de proximidad ("nearshoring") a México está ganando impulso a medida que más empresas manufactureras buscan la forma de reducir costos y colocar sus productos en el mercado estadounidense con mayor rapidez al operar cerca de este. En el Informe se señala que esta tendencia obedece al rápido aumento del costo de la mano de obra en China, que es el mayor centro de deslocalización, y al incremento y la volatilidad de los costos del combustible, que han hecho que el envío de mercancías a través del Pacífico resulte menos atractivo desde el punto de vista financiero. Entre las empresas que han trasladado toda su producción o parte de ella en los últimos años de Asia a México para acercarse a los Estados Unidos cabe citar Emerson (material eléctrico) y Axiom (cañas de pescar).
Informe - http://unctad.org/en/PublicationsLibrary/wir2013_en.pdf
Gráfico 1: Cinco mayores receptores de IED en América Latina y el Caribe, 2011 y 2012
(En miles de millones de dólares)
Fuente: UNCTAD, Informe sobre las Inversiones en el Mundo 2013.
Gráfico 2: Cinco mayores inversores desde América Latina y el Caribe, 2011 y 2012
(En miles de millones de dólares)
Fuente: UNCTAD, Informe sobre las Inversiones en el Mundo 2013.