MACHINE NAME = WEB 1

Se prevé que el crecimiento global se desacelere al 2,6% hasta 2026

Traducción realizada con asistencia de inteligencia artificial.

En caso de discrepancia, prevalece la versión en inglés.

03 diciembre 2025

Las proyecciones sitúan el crecimiento aún por debajo del promedio prepandémico del 3% y muy por debajo del promedio de 4,4% registrado antes de la crisis financiera de 2008-2009.

ONU Comercio y Desarrollo (UNCTAD) proyecta que la economía mundial crecerá solo un 2,6% en 2025 y 2026, por debajo del 2,9% en 2024.

Las proyecciones sitúan el crecimiento aún más por debajo del promedio anterior a la pandemia del 3% y muy por debajo del promedio del 4,4% registrado antes de la crisis financiera de 2008-2009.

Las principales economías también están perdiendo impulso. Se espera que el crecimiento en Estados Unidos desacelere a 1,8% en 2025 y 1,5% en 2026. Se proyecta que el crecimiento de China disminuya del 5% en 2025 al 4,6% en 2026, muy por debajo del promedio de 6,7% registrado antes de la pandemia.

El año comenzó con lo que parecía una recuperación. El comercio aumentó alrededor de un 4%, impulsado por empresas que se apresuraron a importar bienes antes de la imposición de nuevos aranceles y por el crecimiento de la economía digital y la inteligencia artificial. Pero sin estos factores temporales, el crecimiento subyacente del comercio cae entre 2,5% y 3%, y ya son visibles los signos de desaceleración.

Las finanzas dan forma creciente al comercio mundial

Una de las conclusiones principales del Informe sobre Comercio y Desarrollo 2025 de UNCTAD es que las condiciones financieras hoy influyen en el comercio tanto como la actividad económica real.

El comercio no es solo una cadena de proveedores. También es una cadena de líneas de crédito, sistemas de pago, mercados de divisas y flujos de capital, y estos canales financieros determinan cada vez más la dirección del comercio mundial.

Más del 90% del comercio mundial depende de la financiación bancaria. Esta profunda dependencia significa que el comercio reacciona rápidamente a las variaciones de las tasas de interés o del sentimiento de los inversores en los principales centros financieros.

El informe también resalta la creciente importancia de los factores financieros en los mercados de materias primas, especialmente en los sistemas alimentarios. Para varias de las principales empresas comercializadoras de alimentos, más del 75% de los ingresos ahora provienen de operaciones financieras, y no del transporte de trigo, café, cacao u otros cultivos.

El Sur global sigue en los márgenes financieros

Se prevé que las economías en desarrollo crezcan un 4,3%, más rápido que las economías avanzadas. El Sur global genera ahora más del 40% de la producción mundial, cerca de la mitad del comercio mundial de mercancías y más de la mitad de las entradas de inversión global.

Sin embargo, los países en desarrollo poseen solo el 25% del valor de los mercados financieros globales.

Debido a que los mercados financieros domésticos suelen ser pequeños, muchas economías en desarrollo dependen del endeudamiento externo, generalmente a un costo mucho mayor. Son comunes tasas de endeudamiento de entre 7% y 11%, frente al 1% al 4% en las principales economías avanzadas.

Más allá de los mayores costos financieros, enfrentan mayores oscilaciones en los flujos de capital y crecientes riesgos financieros relacionados con el clima. Estas presiones restringen la inversión a largo plazo y ralentizan el crecimiento.

Se necesitan reformas para alinear comercio, finanzas y desarrollo sostenible

El Informe sobre el Comercio y el Desarrollo 2025 presenta un conjunto de reformas prácticas para reducir la vulnerabilidad financiera y alinear mejor comercio, finanzas y desarrollo. Estas incluyen:

  • Actualizar las reglas comerciales para la economía actual, incluidos los servicios, el comercio digital, la acción climática y las nuevas estrategias industriales.
  • Reformar el sistema monetario internacional para limitar las fluctuaciones perjudiciales de monedas y flujos de capital.
  • Fortalecer los mercados de capital regionales y nacionales para que los países en desarrollo puedan obtener financiamiento a largo plazo asequible.
  • Mejorar la transparencia en el comercio de materias primas y ampliar el acceso a financiación comercial asequible, especialmente para las pequeñas empresas.