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Se necesita un cambio urgente de billones de dólares para alinear las finanzas globales con los objetivos climáticos y de desarrollo

06 marzo 2024

A ocho años del Acuerdo de París, la financiación de combustibles persiste en billones de dólares anuales.

A farmer in Bangladesh during a drought.
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© Shutterstock/HM Shahidul Islam | Un agricultor de Sylhet, Bangladesh, durante una sequía.


  • Sólo el 1% de los activos financieros mundiales se necesita para combatir el cambio climático y lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

  • A pesar de los compromisos del Acuerdo de París, la inversión en combustibles fósiles aún supera el billón de dólares anuales.

  • Para cumplir con los objetivos climáticos y de desarrollo, os bancos públicos y de desarrollo requieren más capacidad de préstamo y espacio político.


Se deben movilizar 4 billones de dólares al año para luchar contra el cambio climático y lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), según el último Informe sobre Comercio y Desarrollo de la UNCTAD.

Esto equivale al PIB de Alemania en 2022 y sólo puede lograrse mediante un cambio importante en los flujos financieros mundiales, lo que implica reasignar billones de dólares que actualmente financian -directa e indirectamente- actividades económicas que socavan estos objetivos.

La financiación necesaria es sólo el 1% del total de activos financieros mundiales, más de 470 billones de dólares. "Pero no es fácil desviar recursos de actividades consolidadas y a menudo rentables", afirma Anastasia Nesvetailova, Jefa de la Subdivisión de Políticas Macroeconómicas y de Desarrollo de la UNCTAD.  

"Siempre es un desafío orientar los recursos hacia inversiones nuevas o menos seguras para el desarrollo sostenible", añade.

El informe destaca que, por ejemplo, ocho años después del Acuerdo de París, la financiación de los combustibles fósiles sigue sin disminuir, con más de un billón de dólares anuales a empresas que apoyan nuevos proyectos de desarrollo.

"Esto refuerza las desigualdades climáticas y financieras que existen desde hace tiempo", advierte Nesvetailova. "La financiación de los combustibles fósiles procede en gran medida de las zonas más ricas del mundo, pero son los más pobres quienes más sufren los impactos del cambio climático. También son quienes menos se benefician de la energía de los combustibles fósiles".

Subvenciones de combustibles fósiles a niveles récord

Agravando la situación están las subvenciones "persistentes" para la producción y el consumo de combustibles fósiles, que alcanzaron la cifra récord de 1,3 billones de dólares en 2022. Solo las subvenciones a la producción supusieron 51.000 millones de dólares.

"Su eliminación progresiva contribuiría tanto al reto climático, como a liberar escasos recursos públicos que los gobiernos podrían destinar a otros usos, como las energías renovables y la transición climática justa", afirma Diana Barrowclough, economista de la UNCTAD.   

Pero el informe destaca la dificultad de cambiar el statu quo, especialmente cuando millones de personas dependen de los combustibles fósiles para su sustento y sistemas enteros de producción y consumo.

Además, los bancos, las compañías de seguros y los fondos de pensiones están muy expuestos al sector. En algunos casos, un cambio brusco podría provocar graves perturbaciones financieras en toda la economía. 

"Y lo que es más importante", dice Barrowclough, "muchos países carecen aún de suministros energéticos básicos y todavía tienen que diversificar sus economías y desarrollarse".

“Reducir los grifos" sin desconectar a los países en desarrollo

El informe subraya que el proceso de "reducir los grifos" debe tener en cuenta las distintas necesidades de los países en desarrollo y las comunidades pobres para garantizar que la transición sea sostenible y justa.

"El proceso y la velocidad de reducción de la financiación de los combustibles fósiles probablemente difieran de un país a otro", afirma Barrowclough. "Y debe complementarse con un aumento de la inversión en actividades alternativas que proporcionen empleos generadores de ingresos y respalden un camino de desarrollo para el futuro."

Los hallazgos del informe se vieron reforzadas por la histórica decisión en la cumbre del clima COP28 de eliminar gradualmente los subsidios a los combustibles fósiles que no abordan la pobreza energética y de hacer la transición de los combustibles fósiles en los sistemas energéticos de manera justa, ordenada y equitativa. Papel clave de los bancos públicos y de desarrollo

Los bancos públicos y de desarrollo "son la fuente más importante de capital a largo plazo y en condiciones favorables", afirma Nesvetailova. "También son la fuente tradicional del empuje catalizador que puede desencadenar la transformación económica".

Sin embargo, los 230.000 millones de dólares prestados por los principales bancos multilaterales de desarrollo en 2020 sólo representan una fracción de los 4 billones necesarios. El informe se hace eco del llamamiento del secretario general de la ONU, António Guterres, para que aumenten drásticamente su capacidad de préstamo y su margen de actuación.

Por último, estos diversos esfuerzos funcionarán mejor cuando estén respaldados por un papel más amplio y activo de los bancos centrales. Como el vértice del sistema financiero, los bancos centrales pueden alinear sus actividades con los objetivos climáticos y de desarrollo, ya que establecen las normas y reglamentos para todo el sistema financiero.

No faltan recursos

La UNCTAD identifica reformas que pueden ayudar, como dejar de creer que las operaciones de los bancos centrales pueden ser "neutrales en el mercado", exigir a las instituciones financieras una divulgación climática completa y utilizar tipos de interés variables y requisitos de reservas para préstamos compatibles con los objetivos a largo plazo de las políticas de combustibles fósiles y desarrollo.

"El mundo tiene dinero suficiente para luchar contra el cambio climático y apoyar el desarrollo. Simplemente no se canaliza en la dirección correcta", afirma Nesvetailova. "Es más una cuestión de voluntad política y social que de finanzas".