Convertir la ambición en acción exigirá una reforma sistémica del comercio, la inversión y las finanzas para hacer frente a los retos actuales del desarrollo.

© UN Photo/Mariscal | La Secretaria General de ONU Comercio y Desarrollo (UNCTAD), Rebeca Grynspan (en pantalla y en el podio), intervino en la sesión plenaria de la Cuarta Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo, concluyó el 3 de julio en Sevilla (España).
La Cuarta Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo (FfD4) concluyó el 3 de julio en Sevilla (España) con más de 15.000 participantes y una renovada determinación mundial de movilizar financiación a gran escala, dar prioridad a las personas y reformar la arquitectura financiera internacional.
Su documento final, el Compromiso de Sevilla -aprobado por más de 190 países- establece una visión audaz.
Pero el camino a seguir depende de la ejecución. Como dijo la Secretaria General de ONU Comercio y Desarrollo (UNCTAD), Rebeca Grynspan en su discurso: "La inversión más inteligente que podemos hacer es en nuestro futuro colectivo. La elección es nuestra. Y el momento de elegir es ahora".
Una brecha de 4 billones de dólares: Es hora de reajustar el desarrollo
En un mundo de bajo crecimiento, aumento de la deuda, caída de la inversión y reducción de la ayuda oficial al desarrollo, la promesa de la Agenda 2030 está en peligro. Los países en desarrollo se enfrentan ahora a un déficit de financiación anual de 4 billones de dólares para el desarrollo sostenible.
3.400 millones de personas viven en países que gastan más en pagar los intereses de la deuda que en sanidad o educación.
Para cambiar el rumbo, la conferencia lanzó la Plataforma de Acción de Sevilla, que presenta más de 130 iniciativas para acelerar la aplicación del Compromiso de Sevilla.
Entre ellas se incluyen tres áreas clave:
- Un impulso global a la inversión para cerrar la brecha de financiación.
- Una respuesta seria y largamente esperada a la crisis de la deuda.
- Un cambio en la gobernanza mundial para dar más voz a los países en desarrollo.
ONU Comercio y Desarrollo: Impulsando soluciones sobre el terreno
ONU Comercio y Desarrollo, en colaboración con socios mundiales, codirigirá varias iniciativas en el marco de la Plataforma de Acción de Sevilla, a saber:
- Una comunidad de prácticas sobre datos de cooperación Sur-Sur, que ayude a los países a mejorar la recopilación, el análisis, la gobernanza y el intercambio de datos para reforzar el apoyo mutuo al desarrollo.
- Una comunidad de prácticas para rastrear lo oculto, utilizando datos y herramientas digitales para combatir los flujos financieros ilícitos y desbloquear recursos nacionales para la inversión pública.
- Un catalizador de inversiones en infraestructura digital, desarrollado con la Unión Internacional de Telecomunicaciones, bancos multilaterales de desarrollo, inversores y el sector privado, para ayudar a cerrar la brecha digital permitiendo la financiación colectiva, el intercambio de datos y la creación de capacidades.
En colaboración con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos y otras entidades, ONU Comercio y Desarrollo también ha puesto en marcha una Alianza Mundial para ir más allá del PIB, cuyo objetivo es crear nuevas métricas que vayan más allá de la producción económica para captar la distribución de la riqueza, la resiliencia social y la sostenibilidad medioambiental.
La organización también actúa como cosecretaría del grupo de expertos de alto nivel del Secretario General de la ONU que elaborará recomendaciones para su debate en el 80º período de sesiones de la Asamblea General en 2026.
Foro de Sevilla sobre la Deuda
La conferencia también dio a conocer un nuevo “Foro de Sevilla sobre la Deuda”, un nuevo espacio para que los países coordinen la gestión de la deuda y las estrategias de reestructuración. Una entidad de la ONU actuará como su secretaría, y España -anfitriona de la FfD4- apoyará al Secretario General de la ONU en consulta con los Estados miembros y las partes interesadas para hacer operativo el foro.
El Compromiso de Sevilla reconoce “el imperativo de apoyar el establecimiento de foros liderados por los prestatarios que permitan a los países compartir experiencias, estrategias y buenas prácticas, y promover el endeudamiento responsable y las normas de préstamo”.
Mirando al futuro: Confianza, solidaridad y reforma global
“Invertir en solidaridad global es construir un mundo en el que nadie se quede atrás”, afirmó la Secretaria General Grynspan, de cara a la 16ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD16), que se celebrará en octubre bajo el lema "Forjar el futuro: Impulsar la transformación económica para un desarrollo equitativo, inclusivo y sostenible".
“Para ello necesitamos pensar en el desarrollo de una forma integrada en la que el comercio, la inversión, las finanzas y la tecnología se refuercen mutuamente, tal y como establece el Compromiso de Sevilla”, añadió Grynspan.
Para hacer realidad esta visión será necesario que los sistemas comerciales, financieros y de inversión se centren más en el desarrollo. En particular, la arquitectura financiera internacional debe actualizarse para reflejar las realidades actuales y dar a los países en desarrollo un acceso y una representación más justos.
El comercio sigue siendoa el vínculo más fuerte entre las economías locales y el crecimiento mundial. Comercio y Desarrollo de la ONU sigue abogando por normas comerciales previsibles, políticas transparentes y estrategias de inversión para restablecer la confianza y ayudar a los países en desarrollo a crear capacidad, competitividad y resistencia.
Para que la deuda pública deje de ser una carga y se convierta en una herramienta para el desarrollo, la organización pide mecanismos más justos para reducir los costes de los préstamos, permitir la reestructuración oportuna de la deuda e ir más allá de los límites del actual Marco Común para el Tratamiento de la Deuda del G20.
También apoya los llamamientos del Compromiso de Sevilla para triplicar la capacidad de préstamo de los bancos multilaterales de desarrollo -de 50.000 a 150.000 millones de dólares- y ayudar a los países en desarrollo a impulsar la inversión.