Los emprendedores son clave para impulsar la innovación que tanto se necesita en un mundo post pandemia que busca sistemas de salud más modernos, resilientes, equitativos y responsables.
La pandemia de COVID-19, tras interrupciones sin precedentes en los servicios de salud, ha creado nuevos patrones de demanda en la atención médica para los cuales los países deben prepararse.
Este es el mensaje del nuevo informe de la UNCTAD titulado "Emprendimiento e innovación en la nueva economía de la salud" publicado el 20 de diciembre.
El informe declara que la dinámica tradicional de las economías de la salud ha cambiado. Las soluciones digitales, los modelos basados en datos y las necesidades de los consumidores son ahora el centro de los nuevos ecosistemas de salud, ofreciendo asimismo nuevas oportunidades a los emprendedores.
El informe examina la presión que sufren los sistemas sanitarios mundiales a causa de la pandemia, cómo los emprendedores están innovando para ayudar a mitigar dicha presión y qué pueden hacer los responsables políticos para apoyar.
"Las inversiones inteligentes y la creación de una cultura de innovación y espíritu emprendedor son fundamentales en la nueva economía de la salud", dijo James Zhan, director de la División de Inversión y Empresa de la UNCTAD.
"Los gobiernos deben reconocer el papel que los emprendedores pueden desempeñar en el fortalecimiento de los sistemas sanitarios nacionales y diseñar políticas para maximizar su contribución", agregó Zhan.
Impulsar dinámicas innovadoras
Según el informe, los sistemas de salud de todo el mundo requieren un importante replanteamiento y revisión tras las deficiencias que surgieron durante la pandemia de COVID-19, dice el informe.
Pone en primer plano las vulnerabilidades subyacentes, como las desigualdades y la insuficiente comunicación entre los sistemas de salud pública y los sistemas de prestación de asistencia sanitaria, e insta la necesidad de realizar cambios tanto en el lado de la oferta como en el de la demanda.
Señalando los cambios demográficos y epidemiológicos y la evolución de las necesidades de las personas, el informe subraya el espíritu emprendedor como una fuerza impulsora para la innovación, la investigación y el desarrollo de la atención médica.
Destaca la historia de éxito de iNNpulsa, la agencia nacional de emprendimiento de Colombia, en el impulso del desarrollo de la cibersalud. La agencia fomenta la colaboración entre el sector público, las grandes corporaciones y las start-ups, acelerando las soluciones hacia la salud, la tecnología y la innovación.
Ampliación de las innovaciones sanitarias
El informe esboza un marco para evaluar la escalabilidad y la sostenibilidad de la innovación sanitaria, del que pueden beneficiarse los países en desarrollo.
Identifica cuatro tipos de barreras que impiden a los emprendedores promover la innovación, relacionadas con factores humanos, factores técnicos, el ecosistema sanitario y el acceso a infraestructuras clave como el hardware, electricidad e Internet.
El informe también muestra cómo se aplica el marco de escalabilidad en entornos reales, presentando estudios de casos de innovaciones sanitarias exitosas en África, Asia y América Latina y el Caribe.
El sorprendente equilibrio regulatorio
El entorno regulatorio puede afectar profundamente la capacidad de los emprendedores para crear y aplicar innovaciones en los sectores sanitarios.
El informe pide un equilibrio entre la falta de regulación y el exceso de regulación. Esto requiere "incentivos de atracción" – como la ampliación de la exclusividad de patentes, los precios de primas de compra de patentes y el compromiso de compra anticipada – para aumentar el rendimiento de la inversión en investigación y desarrollo.
Al mismo tiempo, los emprendedores también ofrecen incentivos de "empuje" (por ejemplo, subvenciones, créditos fiscales y asociaciones público-privadas) para ayudar a reducir las barreras de entrada al sector de la salud.
Se necesitan más esfuerzos en materia de políticas
El informe ofrece recomendaciones sobre cómo apoyar el espíritu emprendedor en la atención sanitaria, basándose en el marco de políticas de fomento de la iniciativa empresarial de la UNCTAD.
Para mejorar el acceso a la financiación, que sigue siendo un gran desafío para muchos emprendedores, los gobiernos pueden forjar conexiones entre inversores y emprendedores para impulsar la comprensión de los mercados locales de atención sanitaria.
La falta de confianza también supone un obstáculo para la innovación. El informe pide a los gobiernos que aumenten la información y la difusión de buenas prácticas para ayudar a integrar las innovaciones del sector privado en los sistemas de salud pública.
El fortalecimiento de los sistemas nacionales de salud requiere esfuerzos colectivos. La UNCTAD seguirá apoyando a los países en desarrollo a comprender mejor la intersección entre la capacidad emprendedora y la nueva economía de la salud, además de promover innovaciones impulsadas por el espíritu emprendedor en los sectores de la salud.